Els tardigrads De Al Anochecer Producciones
Supervivientes
Fecha de la representación: 13 de febrero de 2022. Fecha de la crítica: 15 de febrero de 2022. Sala: Ultramar
Los tardígrados son unos seres vivos microscópicos llamados comúnmente ositos de agua. Son unos antecesores terrestres de los artrópodos que sobreviven al vacío en el espacio y a las altísimas presiones por lo que se consideran los más resistentes del mundo conocido. Habitan en los musgos, líquenes y helechos aunque también en aguas oceánicas o dulces. Suelen medir entre medio y cero con cero cinco milímetros y su forma es ovalada. Sus pigmentos les protegen de la radiación ultravioleta, lo que implica su gran capacidad de adaptación a cualquier medio.
Este ser vivo da título a la obra de Pablo Díaz del Río Els tardígrads, nueva producción de Al Anochecer, después de aquel rescate del texto de Juli Disla con el mismo título que el nombre de la compañía estrenado en 2018 en Rambleta. Con los mismos actores, el propio Díaz del Río y Helena Font, y la misma dirección de Sergio Caballero, que además se ocupa de la puesta en escena y el espacio sonoro.
Parte de la pieza corta estrenada en los “Viveros” del festival Russafa Escènica de 2020, el afectado por las restricciones de la pandemia. Se trata de una bonita historia de ciencia-ficción. O distopía si examinamos las derivaciones sobre el tema del cambio climático o las resonancias apocalípticas provocadas por el hombre. Es el año 2050 y no queda vida en la tierra. Solo dos tardígrados han resistido y han sobrevivido a la hecatombe pero por efectos del cambio climático han evolucionado hasta habitar en sendos cuerpos humanos, uno masculino y otro femenino. Hombre y mujer, ella cansada de vivir y deseosa de acabar con su vida monótona y él que no desea la soledad y sí estar con ella. Una bella relación entre dos seres que reconocen estar a gusto juntos pero no se atreven a enfrentarse a esta realidad interior desconocida, salvo en sus sueños, de ahí que en innumerables ocasiones opten por tomar su mochila para marcharse en solitario a otro lugar.
El resultado es óptimo. Los dos personajes intercambian sus diálogos con un tono coherente a su personaje. Ella inconformista e impulsiva, “un culo de mal asiento” que diríamos vulgarmente, mientras él es más tranquilo y reflexivo. Sus palabras y movimientos chocan pero se nota la química entre ambos a pesar de sus caracteres opuestos. Una química también existente entre los actores. Compenetrados a la perfección, bien conjuntados y muy expresivos, Helena Font y Pablo Díaz del Río van construyendo sus personajes recordando su pasado, sacando datos de forma gradual, con la incertidumbre en el presente y anhelos para el incierto futuro próximo. Una actuación muy lograda y ya sabemos que Helena Font es una gran actriz capaz de mostrarse dura y con un carácter difícil casi siempre y sensible en otros momentos. Hay mucha electricidad y no lo expreso por los apagones tan fundamentales.
La puesta en escena es característica de Sergio Caballero. El ritmo es dinámico que adquiere pausa cuando entra en el intimismo en algunas escenas. Su escenario y su espacio sonoro acompañan para dibujar el mundo apocalíptico, una casa llena de restos, papeles, objetos, un sofá, y hasta algunas mascarillas, todo desparramado por el suelo porque como expresan los actores, pasaron por una era Covid y treinta años después están en un mundo vacío y sin nadie alrededor. Las salidas y entradas con la maleta, y ella en bicicleta, marcan el juego dialéctico, así como esos excelentes fragmentos monologados a media luz donde cada personaje expresa su intimidad, lo que le diría al otro y no se atreve. Muy curiosa es la apertura de la maleta de él después de una disputa por la cantidad de objetos, hasta una baraja de póker, mientras lleva una carga difícil de arrastrar.
Una historia bella, a pesar de la suciedad ambiental y los desarrapados personajes. Muy bien dibujada donde el amor y la necesidad de aceptación del otro son su mensaje. El duelo entre ambos actores está trazado con cohesión y mucho sentido, a pesar de algún bajón inevitable porque todo juego no puede mantenerse con todas las escenas tan potentes. Y con un remate desde la oscuridad muy original. Vale la pena.
FICHA ARTÍSTICA
Texto: Pablo Díaz del Río. Actores: Helena Font – Pablo Díaz del Río. Dirección, puesta en escena y espacio sonoro: Sergio Caballero. Técnico: José Ramón Pérez. Cartel: Jaume Marco. Producción ejecutiva: Melania Rodríguez. Producción: Al Anochecer Producciones e Ibáñez y Payá.